miércoles, 28 de noviembre de 2012

Quiero servir al Dios que tú sirves…

Había una ves un niño sentado a la orilla de la banqueta, alado de un pequeño charco de agua, el era feliz alabando a Dios ,cuando ve a lo lejos acercarse un hombre de edad avanzada... de pronto Vió que se sentó junto a el... en ese momento hubo un momento de silencio...de pronto aquel hombre le preguntó al niño... ¿por qué estas tan feliz? el con una sonrisa en su r
ostro le contestó por que hoy aprendí que Dios abrió el mar rojo para que el pueblo de Israel pasara en seco… El hombre molesto le contestó esa es una gran mentira!!! Dios no pudo haber abierto en dos el mar debió haber sido un pequeño charco … a lo que el niño exclamo con gran Júbilo… entonces fue un gran milagro que con un pequeño charco murió todo el ejercito de faraón… aquel hombre quedo asombrado a tal contestación del niño… y le dijo de ahora en adelante dejo de ser ateo por la verdad que escuchado salir de tu boca… Quiero servir al Dios que tú sirves…

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